Manos inquietas y miradas ansiosas, sonrisas de complicidad aquí y allá, señales inequívocas que las vacaciones de verano están por comenzar.
La cuenta regresiva ya inició: unos cuantos minutos más y la estampida humana abarrotará el elevador y las escaleras huyendo de la rutina y del trabajo.
Yo aún no tengo nada planeado, pero el calorcito y la posibilidad de salir de la ciudad tal vez influyan en mí... sobre todo cuando me imagino estar sentado frente al mar con una cerveza helada y alejado de cualquier cosa que huela a oficina.
Sin embargo tenemos algunos pendientes de la boda, detallitos por aquí y por allá que nos mantendrán ocupados estos días, aunque con un ritmo más descansado.
Independientemente de todo, lo mejor es que tengo por delante dos semanas en las que podré levantarme a las 8 de la mañana, olvidar el rastrillo una que otra vez y desvelarme viendo cualquier cosa en la tv por el puro gusto de hacerlo.
3 comentarios:
como creeeeees, puras salidas contigo, te envidiooooo
princis
preparando patitas y motores para la fiestaaaaaaa
princis
el que se quejaba por que yo no posteo... estás de la verch, che quejumbres!...
Un saludo y ya pon algo nuevo
atte:;
cachalote
Publicar un comentario