lunes, 25 de junio de 2007

Viaje en puerta


Arena y mucho sol, calor tropical y bebidas heladas, vida nocturna que transcurre con aroma a coco… Mañana salgo de viaje a la playa con todos los gastos pagados.

Y contrario a lo esperado, no me hace tan feliz. Será que viajo por cuestiones de trabajo, con mi jefe directo y que nos hospedaremos en el mismo hotel, todo para poder cubrir el VIII Congreso Nacional de Jueces de Primera Instancia.

Lo bueno es que las jornadas de trabajo empiezan a las 10 de la mañana y concluyen a las 8 de la noche, dejando un margen de tiempo bastante decente como para aprovechar las bondades del hotel todo incluido y de los antros que inyectan de vida el Malecón.

Mi último viaje a Vallarta también fue por cuestiones de trabajo, sólo que aquella vez el buen Fat salió al quite y se unió a la expedición laboral. Todavía recuerdo las fotos, el buen humor, los vodkas con jugo de naranja y a mi compañera de trabajo y él haciendo gala de sus mejores pasos de baile...

Esta vez será el Velas Vallarta, esta vez serán 5 días… Pero esta vez extrañaré al Fat y, más que nada, a Susana.

miércoles, 20 de junio de 2007

Sueño infantil


Quiero unos lentes. Unos lentes de aumento, de esos que te ayudan a ver mejor. Desde niño soñaba con tener unos lentes así, claro que como nunca los necesité pues nunca me los compraron.

Incluso recuerdo haber acompañado más de una vez a mi abuelita con el Oculista y haberme quedado extasiado ante la vitrina de los armazones. No sé, será que en esas épocas me parecía fantástico poder transformarte en alguien más al ponerte detrás de un accesorio tan sencillo, tal como lo hacía Superman para pasar inadvertido.

Para colmo siempre he sido el de mejor visión en mi familia. Mi hermana tuvo lentes desde la secundaria y mis padres también los necesitan. Mi hermano terminó por comprar los suyos hace algunos años.

Yo todavía me defiendo, aunque ya me cuesta trabajo leer los subtítulos de las películas en la televisión, los veo movidos, como mal sintonizados. Y ahora que lo pienso también las luces de los carros en la noche las veo muy brillantes, como si los haces de luz formaran unas estrellas alrededor de los faros…

Será tal vez que con el uso diario de la computadora mi vista se ha resentido, pero por lo demás, en situaciones habituales, veo muy bien. Nada de que no reconozca a alguien cuando me saluda desde la acera de enfrente y cosas así.

De lo malo, lo mejor, creo que por fin uno de mis sueños infantiles se hará realidad pronto. Sin embargo aún tengo algunas dudas al respecto… ¿Qué tipo de armazón me viene mejor? ¿Tendré que usarlos todo el tiempo? ¿Realmente pasaré inadvertido ante los demás? ¿Ya no me reconocerán con ellos? ¿Seré otro?

Sólo el tiempo lo dirá…

martes, 19 de junio de 2007

Suavemente

Las ideas siguen flotando en mi cabeza, como impulsadas por un viento suave pero constante. Como nubes sobrevolándome.

Reflexiones sobre mí, sobre Susana, sobre nosotros dos… de todo lo que viene, de todo lo que espero y deseo.

Ideas que revolotean en mi cabeza como mariposas. Recuerdos, sensaciones, deseos, ansias, que dejan paso a lo nuevo…

Miradas, sonrisas, abrazos, palabras apenas musitadas, suspiros, silencios… El acervo emocional de lo que viví, de lo que me hace ser quien soy.

Y el tiempo, la experiencia, el camino recorrido, me hace apreciar lo que encierro en el pecho, lo que me hace mirar hacia delante, sabiendo lo que dejo detrás de mí.

miércoles, 13 de junio de 2007

Me verás volver


Aún recuerdo aquella mañana, que de pie en el Samborns de Plaza del Sol, tuve en mis manos el que sería mi primer disco LP de Soda Stereo. Era el de "Nada Personal" y la emoción hacía presa de mí a los 14 años.

20 años después, a diez de haberse desintegrado el grupo en el culmen de su éxito, se anuncia su regreso en una gira internacional y la emoción me invade nuevamente, despertando en mí al fan que permanecía en estado latente.

Será que su música siempre estuvo ahí, a mi lado, marcando las diferentes etapas de mi vida. Será que cada vez que escucho alguna canción irremediablemente me transporto hasta la época en que la escuché por primera vez. Épocas de transición, de exploración, de descubrimientos...

"Me verás volver", es el nombre de la gira que promete traer a Soda Stereo en noviembre y que parafraseando la canción de "La ciudad de la furia" reúne otra vez a Cerati, Bosio y Alberti.

Será cuando de nueva cuenta un temblor largamente olvidado recorra mi cuerpo y la emoción me haga brincar una y otra vez, mientras tantas épocas y tantas canciones concurran en un solo espacio, en un solo momento...


Un señuelo,
hay algo oculto en cada sensación.
Ella parece sospechar,
parece descubrir
en mí,
que aquel amor
es como un océano de fuego
oh mi corazón se vuelve delator.
La fiebre volverá...
de nuevo

Inicio

Pues sí, por fin el sábado pasado cambié mi estatus civil. De ahora en adelante, cada vez que llene un formulario y llegue a ese apartado, escribiré: casado.

Fueron varios días previos de carreras, de trámites, de preparativos y, aunque no lo creía, de nerviosismo. Según yo muy tranquilo y a la mera hora… ¡zas! un ataque de fiebre que me mantuvo en cama con el cuerpo cortado me demostró lo contrario.

Lo bueno es que ya se consumó todo: las dos familias emocionadas y bien peinadas, la cena esperando ser servida al igual que las botellas de vino. Sonrisas, saludos, alegría y emoción en el ambiente.

En punto de la hora llegó el oficial del Registro Civil, formal y muy amable, para inmediatamente proceder con la ceremonia. Todo bien, hasta que pasó lista de los testigos y faltaba una...

Dos llamadas telefónicas y siete minutos después el oficial pudo iniciar los trámites, no sin antes bromear que ella pagaría la cena, rompiendo así la tensión que se había generado.

Una pequeña pero sensible reflexión sobre la importancia del paso que íbamos a dar, el agradecimiento a nuestras mamás ahí presentes, la negativa de las testigos de conocer impedimento legal alguno, la manifestación expresa de Susana y mía de aceptarnos como esposos, la firma del acta y... voilà! Una nueva familia acababa de nacer.

Muchos abrazos, muchas fotos, muchas sonrisas y felicitaciones, varios vasos de whisky, uno que otro cigarro y los nervios se fueron diluyendo hasta dejar finalmente una mezcla de emoción e incredulidad en nosotros, que hacía aparecer sendas sonrisas de felicidad cuando nuestras miradas coincidían.

Y así, de esta forma, esta pequeña historia de amor no termina… apenas empieza, porque como dice un querido amigo: Lo mejor está por venir.



MIS DOS FAMILIAS

viernes, 8 de junio de 2007

Fiebre


Será que me dormí con el ventilador apuntando a mi espalda toda la noche o de plano el aire acondicionado de la oficina, pero ayer me empezó desde en la mañana un dolor de espalda, de esos que te impiden moverte bien.

Para cuando terminé de comer de plano empecé a arder en calentura y tuve que permanecer acostado toda la tarde, con el cuerpo cortado y muy débil, como pollito deshuesado.

Una friega de alcohol estilo abuelita, dos pastillas de Advil y té, mucho té, mitigaron un poco la fiebre, pero aún así dormí envuelto en sudor.

Lo malo es que no podía faltar a trabajar, así que con suéter pero aquí estoy batallando contra el aire acondicionado, contando los minutos para poder irme a mi cama otra vez…

¿Serán los nervios? ¿Será melón? ¿Será sandía? ¿Será la vieja del otro día?

jueves, 7 de junio de 2007

Usa protector solar



Uno de los mejores mensajes que me han enviado...

¡Muchas gracias Mike!

Otro día

Reflexionando sobre lo mal que me sentía el día de ayer, creo que la resaca fue especialmente cruel por tres motivos:

El primero, la gran cantidad de alcohol ingerido, pues la sana convivencia se extendió más allá de las 2 de la mañana con el consabido consumo proporcional al tiempo invertido. Segundo, la falta de condición etílica pues hacía mucho que no tomaba tanta cerveza y, Tercero, a la pérdida de aquella maravillosa facultad de amanecer fresco como lechuga después de una peda, sin molestias aunque con algo de sed. Por eso mismo en las últimas fiestas y reuniones sólo he tomado vodka tonic, tratando de alguna manera de evitar la deshidratación de la cerveza.

En fin, amanecí mejor después de una noche de insomnio y calor, y eso que tuve que levantarme temprano para volver a la Cruz Verde “Delgadillo Araujo” a recoger los resultados de los exámenes prenupciales. Hoy puedo decir orgullosamente que no tengo VIH ni ninguna enfermedad de la cual preocuparme.

Lo mejor de todo es que después de haber pasado más de una hora haciendo antesala para ser recibidos por la doctora en turno, rodeados de personas con diferentes caras de dolor y cansancio, Susana y yo pudimos disfrutar de un rico desayuno en el Chai que nos supo maravillosamente después de tanto ayuno obligado.

Y finalmente estoy frente a mi computadora, de regreso en esta oficina, con una sonrisa de satisfacción en el rostro y dispuesto a enfrentar las últimas horas de trabajo con la barriga llena y el corazón contento.


LOS DELICIOSOS HUEVOS RANCHEROS CON
FRIJOLES Y CHILAQUILES ROJOS QUE ME DESAYUNÉ


miércoles, 6 de junio de 2007

Crónica de una resaca anunciada


Un sonido molesto y repetitivo me arrastra desde las profundidades de la inconciencia… entreabro los ojos y al instante mi cuerpo entero es asaltado por un profundo malestar paralizante. Guiado por el sonido más que por la vista, mis manos palpan hasta encontrar mi celular y apagan la alarma, para inmediatamente volver a caer… caer… caer en un agradable sopor que me aisla del dolor y de la realidad.

Cuando al fin la luz de la conciencia se hace presente en mí y me doy cuenta de que tengo que ir a trabajar, es porque he repetido el proceso infinidad de veces y ya es tarde, muy tarde. Me levanto con un mareo impresionante y por un instante estuve a punto de comprobar la dureza del piso al intentar llegar al baño.

Enciendo la luz y abro la regadera, el dolor de cabeza es impresionante. Apenas y puedo abrir los ojos, tal parece que en lugar de lengua amanecí con un estropajo en la boca, un estropajo reseco además.

Mientras el agua fría me ayuda a terminar de despertar, el olor a cigarro se desprende poco a poco de mi cuerpo. Al nulo apetito se suman las náuseas, que permanecerán durante casi toda la mañana…

Y pensar que lo que ayer era una buena idea, se convertiría en la pesadilla del día siguiente: Echarse unas chelas para mitigar el calor aprovechando el 2x1 de La Enredadera, donde unos tarros helados de cerveza de barril nos dieron la energía suficiente para emprender el éxodo hasta La Diablita, donde vimos el partido de México vs. Paraguay mientras las cervezas y las botanas danzaban alegremente sobre nuestra mesa.

Cigarros, chelas, chistes y plática sabrosa ayer, dolor de cabeza y trabajo temprano hoy, ¿dónde diablos dejé mi cajita de sal de uvas Picot?

Los pastores ya están viejos, diría Vida…